17 julio 2008



Dedicada al homo sapiens periodistus, o sea, el señor Martínez Cantos.
Allá va, impregnando de conocimiento radiofónico a los fieles oyentes que escuchan sus saludos cordiales, sus conversaciones a raudales, orador empedernido y punki intergaláctico. Por cierto, el autoestopista sigue haciendo dedo en la estantería de mi cuarto. Pero tranquilo, que yo también sé que es tuyo y no lo dejaré tirado por carreteras secundarias.

2 comentarios:

Álvaro Martínez @alvarom dijo...

Oh... me siento halagado, señor cagadillas. Mañana mismo emprende usted el primero de su serie de viajes inolvidables. Que sepas que el "Sé" preside mi habitación, y me ayuda a cargar fuerzas cada mañana cuando me voy a cumplir con el trabajo.

Día a día se empiezan a ver claros en el horizonte del futuro, auqnue el gran claro por el que meterme puede que aún esté algo lejos. Parece que en este juego hay que tener también paciencia y esperar a que te señalen para saltar, sólo hay que estar preparado y "ser".

Cuídame al autoestopista, y préstalo si alguien quiere leerlo, que merece la pena pasar un buen rato.

Besote, feo.

Peter Pánico dijo...

Ahí lo tienes :D ¿Cómo no iba a dedicarte el espacio? Si este espacio es infinito!

un beso de mula, esquilador de las palabras, domador de la lengua perdida!